lunes, 31 de marzo de 2014

La orientaci贸n en el espacio, el tiempo y la persona es la esencia del comportamiento y la base de un examen mental neurol贸gico y psiqui谩trico del individuo. Los estados de desorientaci贸n pueden ser la manifestaci贸n caracter铆stica de varios trastornos neuropsiqui谩tricos, en el caso que nos ocupa, la enfermedad de Alzheimer representa un s铆ntoma inequ铆voco y manifiesto en todos los casos.
En estos procesos, los objetos familiares aparecen para los enfermos como desconocidos o el espacio/ lugar se torna confuso, lo que conlleva una navegaci贸n o un transitar dif铆cil (la desorientaci贸n espacial). Aquellos enfermos que no pueden hacer uso de objetos o pistas integradas en el entorno, pueden vagar lejos, en su intento de encontrar algo que le resulte familiar o clarificador y perderse o extraviarse en cualquier lugar.
 
El rostro expresa la extra帽eza, el desconcierto, retrato del miedo y de la p茅rdida, la reacci贸n de una mirada temerosa que busca aferrarse a algo familiar, algo conocido.
(Videoportrait In reverse - "Diny" de Simone Engelen).
Con el curso de la enfermedad, la conducta se encuentra marcada por los olvidos y los d茅ficits en la capacidad de comprender, razonar y usar un buen juicio, capacidades que se encuentran gravemente afectadas. El enfermo se vuelve pasivo, dependiente y ap谩tico, en ocasiones temeroso e inquieto, con tendencia a la irritabilidad y a la depresi贸n.

La desorientaci贸n en persona constituye el olvido de la memoria autobiogr谩fica, de la identidad . La expresi贸n de ensimismamiento en perpetua petrificaci贸n muestra una ausencia personal.
(Videoportrait In reverse - "Jeane" de Simone Engelen).
La desorientaci贸n espaciotemporal puede llevarle a despertar en la noche y a vagar por la casa. En principio, las personas desorientadas llevan peor la esfera emocional de la enfermedad, al ser conscientes de los cambios y la necesidad de apoyo. Pueden habitualmente estar asustados, avergonzados y dilapidados por una baja autoestima. Los problemas se agravan cuando los familiares que no son conscientes del problema interpretan inadecuadamente estas conductas consider谩ndolas fruto de la terquedad, la hostilidad, la falta de cuidado o los comportamientos dirigidos a llamar su atenci贸n.


El enfermo de Alzheimer sufre confusi贸n y desorientaci贸n espacial,
por lo que puede llegar a perderse en la calle donde siempre ha tenido su domicilio
o despistarse en lugares anteriormente conocidos por 茅l.
("Evening walk" - Lyudmila Agrich ).


Los episodios de desorientaci贸n temporal son caracterizados por la incapacidad para recordar la fecha, el d铆a en el que estamos, la estaci贸n, mes o a帽o. El progresivo deterioro intelectual mermar谩 sucesivamente esta propiedad hasta la p茅rdida severa de memoria en fases avanzadas. Para ayudar a mantener la noci贸n del tiempo es interesante la instauraci贸n de una rutina regular, que siga un plan de acci贸n b谩sico todos los d铆as. Del mismo modo, adoptar un entorno estable y familiar, seguro y ordenado es de gran ayuda para reducir la ansiedad y la desorientaci贸n.



La dificultad o incapacidad para recordar el d铆a o el mes en
el que est谩n es una de las caracter铆sticas comunes en los
enfermos de Alzheimer.
(Detalle). ("La persistencia de la memoria". Salvador Dal铆.
1931. MOMA. Nueva York).



Fuente de las im谩genes:  Capturas del proyecto In reverse de Simone Engelen, joewadefineart.com, Moma.org

jueves, 20 de marzo de 2014

Cuando la persona es diagnosticada en sus fases iniciales del padecimiento de la enfermedad de Alzheimer, a煤n es independiente. De este modo preservar esa propiedad y respetar su toma de decisiones es fundamental en este sentido. El enfermo es un adulto y debe consider谩rsele  como tal , ocupando en asociaci贸n con 茅l sin forzarle a tomar decisiones ya que desencadenar谩 una situaci贸n de resistencia y resentimiento, de igual modo esta situaci贸n le llevar谩 a una situaci贸n cooperativa y de cumplimiento.
 
 
Posibilitar su independencia funcional y ejecutiva es transcendental
en primeras fases para permitir la preservaci贸n de capacidades.
 
La consternaci贸n del diagnostico y la cantidad de informaci贸n sobre la enfermedad que comienza a recibir puede llevarle a la sobreprotecci贸n y a creer que el enfermo desde el principio ya no es el mismo de antes e incluso a producir pensamientos negativos y sentimientos de sobrecarga y llegar a ver que la situaci贸n le sobrepasa.
 
 
" La actitud m谩s positiva que puede adoptar el cuidador de un enfermo de Alzheimer es evitar la sobreprotecci贸n del paciente a su cargo". (Guillermo Pascual, jefe de la unidad de Demencias del Hospital Neuropsiqui谩trico Nuestra Se帽ora del Carmen de Zaragoza).
 
El asesoramiento profesional debe canalizar esta primera batalla, en primeras fases de la enfermedad el conocer adecuadamente el problema, estacionarse en la enfermedad y en todas las situaciones que conlleva es un buen comienzo. El profesional (m茅dico, psic贸logo, trabajador social) puede dar pautas sobre la situaci贸n en la que se encuentra as铆 como conocer todos aquellos programas y tratamientos que puedan serle de ayuda. Potencialmente, conectar con personas o grupos de personas que vivan la misma situaci贸n es un alivio necesario y una poderosa medida para encarar esta etapa de inicio.
 
 
El asesoramiento profesional cualificado le permitir谩 una atenci贸n eficaz
y una oportunidad valiosa de resolver sus dudas acerca de la enfermedad.
 
Ante tempranos s铆ntomas de conducta inusual en el enfermo, importante no culpabilizar (la ocurrencia entre otros de lapsus de memoria, cambios de humor, afectivos o de personalidad, depresi贸n o problemas f铆sicos). Estos cambios en principio son m铆nimos, pero constituyen la primera se帽al de alerta y de frustraci贸n del cuidador, que r谩pidamente juzga err贸neamente dichas manifestaciones como un brusco empeoramiento o un apresurado deterioro en el familiar enfermo.
 
 
El distanciamiento del enfermo de Alzheimer en las primeras fases obedece a su percepci贸n de d茅ficits, los cuales comienzan a ser visibles en situaciones de intercambio social.
 
El cambio de personalidad comienza a reflejar aquellas limitaciones que perturban al enfermo (los problemas de lenguaje, el juicio pobre o disminuido, la p茅rdida de iniciativa y por lo general la dificultad para llevar a cabo tareas familiares o mec谩nicas) expresa su irritabilidad y el constante alejamiento de encuentros sociales. Esta reacci贸n puede interpretarse como un mecanismo de defensa que manifiesta el enfermo ante el consciente miedo al deterioro y su autopercibida incapacidad y confusi贸n.
 
Fuente de las im谩genes: static.guim, guardianprotection, forcivilminds.org, dailymail.co.uk (Alamy).
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 

martes, 11 de marzo de 2014


El padecimiento de la enfermedad y la edad avanzada presentan como factor a帽adido la presencia del dolor. El enfermo no lo detecta ya que junto a los cambios producidos por el envejecimiento modifican la sensibilidad de procesamiento y regulaci贸n del dolor.
 
La no apreciaci贸n del dolor ocasiona distintas alteraciones fisiol贸gicas as铆 como una causa de deterioro cognitivo o ser causante de depresi贸n, confusi贸n y trastornos del sue帽o entre otras.
 
En el enfermo de Alzheimer, se encuentra da帽ada la percepci贸n del  cambio de umbral en el dolor y el componente afectivo modificado. Siguiendo las conclusiones de Alaba y colaboradores (2011),  en la percepci贸n del dolor en enfermos de Alzheimer:
 
* Las personas sin demencia experimentan significativamente m谩s dolor que los pacientes con EA, con independencia de su estadio de enfermedad.
 
* Los pacientes de EA en una fase temprana reportan m谩s dolor que aquellos en una etapa m谩s avanzada de la enfermedad.
 
* Los pacientes con EA tienen igual umbral del dolor, pero una significativa mayor tolerancia al mismo.
 
* Los pacientes con EA experimentan una reducci贸n en los aspectos motivacionales / afectivos del dolor.
 
* Los pacientes con EA en relaci贸n con personas mayores sin demencia, presentan un umbral m谩s alto para la activaci贸n auton贸mica.
 
* Los pacientes con EA pueden ser m谩s sensibles al dolor agudo respecto al cr贸nico.
 
Con la aparici贸n de la demencia, el dolor emerge como consecuencia. El inmovilismo, problemas osteoarticulares, s铆ntomas vegetativos, 煤lceras por presi贸n son las manifestaciones m谩s habituales de esta frecuente problem谩tica en el anciano.
 
 
 El dolor persistente puede ser uno de los principales causantes de graves trastornos de conducta.
 
 
Actualmente se sabe que el dolor se encuentra infradiagnosticado y por lo tanto no sometido a tratamiento. Un aspecto oculto de este padecimiento que enlaza con la caracter铆stica de que es una experiencia subjetiva que 煤nicamente puede valorarse correctamente mediante la declaraci贸n de quien lo sufre.
El inconveniente en los enfermos de Alzheimer y en ancianos de edad avanzada junto a la no percepci贸n de la sensaci贸n de dolor, a帽ade la incapacidad de comunicaci贸n o de lenguaje. Investigaciones aportan datos contundentes a esta propiedad de las demencias con el dolor. Scherder (2003) apunta que tanto en la EA como en la demencia Frontotemporal, por la p茅rdida y atrofia de v铆as neuronales resultan da帽adas aquellas 谩reas corticales y v铆as centrales relativas al dolor, modificando y alterando en consecuencia la percepci贸n del mismo.


 
La polifarmacia, habitual en el paciente anciano condiciona que a帽adidos
a los problemas del dolor, sea susceptible a un cuadro de efectos secundarios
 que agravan la situaci贸n.

Para paliar las lagunas informativas acerca del dolor y sus patentes limitaciones perceptivas, la familia y los cuidadores cercanos pueden ser fuentes fiables de informaci贸n (observaci贸n de comportamientos y conductas o expresiones sugerentes de molestia o disconfort). Entre las conductas observadas que denotan el padecimiento o aflicci贸n en el enfermo de Alzheimer est谩n : la agitaci贸n, la irritabilidad, la agresividad, la inquietud, el negativismo o la resistencia a los cuidados y el estado de 谩nimo negativo (expresiones faciales de tristeza, miedo o sufrimiento), lenguaje corporal (tensi贸n, forzar o cambiar de postura 茅l/ella  mismo/a), entre otras.

Desde postulados valorativos, la confecci贸n de escalas estructuradas y valoraciones mediante test como las m谩s fiables a este sentido, la escala de disconfort de Hurley (DS-DAT) y la escala Pain  assesment in advanced dementia (PAINAD).

 
 Para consultar la informaci贸n de otras escalas disponibles actualmente para registrar el dolor en el anciano con demencia, puede consultar el siguiente enlace bibliogr谩fico:

 
Guerrero Navarro, M. (2013) .Valoraci贸n de dolor en el paciente con demencia. Enfermer铆a del envejecimiento. EUESJD. Sevilla.

http://goo.gl/f9b9L7



 
Fuente de las im谩genes: emaxhealth, drugfree.org










 
 
 
 
 
 
 
 
 
 

mi茅rcoles, 5 de marzo de 2014

CANTANDO POR EL CEREBRO

Posted by Angel On 3/05/2014 No comments
En anteriores entradas (Las propiedades  m谩gicas de la m煤sica en enfermos de Alzheimer) analizaba el est铆mulo que supone la m煤sica en las emociones y el estado an铆mico del enfermo de Alzheimer, en este caso cantar persigue el mismo objetivo. El programa cantando por el cerebro (Singing for the brain) un proyecto creado por Chreanne Montgomery-Smith, West Berkshire con Alzheimer´s Society y recogido en un fant谩stico documental por Celia Rice (Bournemouth University).
 
 
El n煤mero de participantes est谩 comprendido entre 25 a 31 personas por sesi贸n.
 
Este programa muestra como cantando e interactuando con la m煤sica y las canciones, el grupo se une y celebra un ambiente social, agradable y estimulante. Los enfermos y sus cuidadores se relacionan mutuamente con otras personas buscando un encuentro que permite la satisfacci贸n, la diversi贸n y el punto de apoyo mutuo. Cantando por el cerebro es un proyecto que unifica la salud y el arte entre los cuidadores y enfermos como una rica oportunidad terap茅utica de participar en una actividad grupal. El programa obtiene interesantes resultados en las esferas psicol贸gica , social y emocional siendo un importante valor terap茅utico para mejorar la condici贸n de demencia y retrasar el avance del deterioro cognitivo. Entre los beneficios  adem谩s de los se帽alados, rompe con el aislamiento y la depresi贸n, as铆 como propicia el ascenso de un nuevo papel en el cuidado centrado en la persona.
 
 
 
Entre los principios del programa se recomienda asistir al menos a tres sesiones con el objetivo de familiarizarse con la rutina de actividades creada.
 
Las propiedades terap茅uticas de la m煤sica, la escucha o la participaci贸n activa sostienen un sano equilibrio en los procesos psicol贸gicos y emocionales, as铆 como un aut茅ntico punto de partida de experiencias del recuerdo mediante valores culturales e hist贸ricos. La m煤sica contextualiza al enfermo, surge como un veh铆culo de positividad an铆mica compartida ( en comunidad o grupos). Es ante todo un programa que proyecta estimulaci贸n y actividad.
 
La capacidad para responder a est铆mulos musicales sobreviene al deterioro de facultades as铆 como engrandece la comunicaci贸n, la expresi贸n e incluso la actividad f铆sica desmejorada y aparentemente perdida en los enfermos de Alzheimer.
 
¿Qu茅 hay detr谩s del acto de cantar? Los efectos positivos de la contribuci贸n musical, el sonido, el uso de la voz constituye un fen贸meno que incluye la relajaci贸n f铆sica, mejora la respiraci贸n y la postura, incrementa la actividad muscular facial, fomenta a niveles culturales, sociales y emocionales los v铆nculos asociativos as铆 como se han informado de importantes beneficios para el coraz贸n, el sistema inmune y otras funciones  f铆sicas. Otros beneficios incluyen la reducci贸n de la agitaci贸n y la conducta indeseable, incrementa la comunicaci贸n y estimula la participaci贸n en la actividad.
 
 
Carole se levanta y comienza a bailar (minuto 3.10 del documental). El programa trabaja la estimulaci贸n de las funciones psicol贸gicas y f铆sicas (hablar sobre la canci贸n y su letra, bailar, secuenciar gestos, llamada y respuesta a eco etc.).
 
 
¿C贸mo naci贸 este programa? En la primavera de 2003 como una iniciativa que buscaba unir la experiencia familiar de la demencia y el potencial del canto y la m煤sica para mejorar el bienestar de las personas con demencia y de sus cuidadores. En principio fue lanzado como un estudio piloto por el profesor Nicholas Bannan. Este estudio piloto lider贸 m谩s tarde un proyecto dirigido por Liz McNaughton.
 
 
Los cuidadores suelen sentarse al lado de la persona a la que han tra铆do. Las sesiones correlacionan con un punto de encuentro entre otros cuidadores siendo amenizadas con una comida tras la sesi贸n.
 
 
¿Cu谩les son los objetivos del programa Singing for the brain - Cantando por el cerebro?
Fundamentalmente el mantener funciones mentales a trav茅s de una actividad aer贸bica suave y ayudar a cuidadores y enfermos a generar circunstancias y convivencias felices compartidas mediante una estimulaci贸n grupal en la b煤squeda de comunicaci贸n.
Otro de los objetivos es prevenir estados depresivos adem谩s de crear una red de intercambio de ayuda y apoyo entre miembros.
 
Puede ver el documental completo siguiendo este enlace:
 
 
 
Fuente de las im谩genes: Capturas del documental Singing for the Brain (2013) de Celia Rice.
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
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